En esta hacienda podemos encontrar restos arqueologicos y eso es lo que la
hace un lugar interesante y actractivo para la poblacion esta hacienda tiene
muchos años de vigencia y apesar del tiempo sigue siendo un lugar interesante
para visitarlo y alejarnos de la ciudad para admirar la naturaleza y tener o
encontrar un poco de tranquilidad.
Esta ubicada a pocos kilometros de la ciudad de Pimampiro.
Ganadería de Quilque.- Corresponde a la actual hacienda “La Mesa” de propiedad de la familia Román Zuleta. Es una de las mesetas más baja del interior del territorio pimampireño donde casi en su totalidad se cultiva pasto para abastecer al patrimonio ganadero; la misma que abasteció de este líquido vital a esta población desde tiempos muy remotos.
ResponderEliminarSería muy interesante que esta hacienda se transforme en un Paradero Turístico y, su meseta, de restos arqueológicos, en un lugar de investigación para antropólogos y arqueólogos.
ResponderEliminarEl paraíso escondido está en los trigales
EliminarEl paraíso escondido está en los trigales
ResponderEliminarLuis Rivadeneira Játiva
A Ignacio Román Zuleta, (Romanzú).
Qué bueno, conocer en vida el paraíso
y retener en la mente
a los trigales,
y personas
que comparten
deliciosa comida
y entregan el trigo
a los más necesitados.
Conocimos Pimampiro
y su hacienda “La Mesa”
de don Humberto Román,
quien conoció la historia
de Fray Jodoco Ricke,
en cuyas manos
llegaron a Quito
las primeras
semillas
de trigo.
En Usurco,
monte del oso,
una planicie baja,
está la tierra prometida,
a los cultivadores de trigo.
En esta vieja hacienda
se compartía comida
con los necesitados,
quienes, además,
recibían trigo,
para su pan
de todos
los días.
Con alegría
estuve de niño
entre las personas
que recibían el trigo,
y don Humberto Román
a más de entregarme trigo
supo acariciarme con sus manos.
Aquí, en la tierra de Pimampiro,
en donde se respira aire puro
y se disfruta de agua pura,
está la tierra prometida,
el paraíso escondido,
en la parte oriental
de Imbabura.
En lugar
de gozar
del paraíso,
los hijos de
don Humberto,
han venido a Quito,
sin darse cuenta
que su alma
se quedó
en la hacienda
“La Mesa”, de Pimampiro,
donde se ubica el paraíso.
Ignacio Román Zuleta
más conocido
en el mundo
de las artes
como:
“Romanzú”,
elabora su arte
con espigas de oro.
Los Román Zuleta,
no deben olvidarse
de las espigas de trigo.
Para que todos ellos
tengan gran riqueza,
basta con decirles
que deben seguir
el ejemplo de su padre,
quien ya se ganó el paraíso,
siendo hijo predilecto de esa región
y fundador del Ingenio Azucarero de Tababuela,
cuyo producto es el azúcar para endulzar nuestras vidas.
Quinta María de Lourdes, Tababela, 20 de enero de 2019.